El consejero de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, David Mascort i Subiranas, anuncio  durante una visita a la nueva planta de producción de biometano del depósito controlado de residuos de Can Mata, en Els Hostalets de Pierola (Anoia), que «la Generalitat aprobará antes de finales de año la Estrategia del biogás de Cataluña 2023-2030 para incentivar la producción de este gas renovable en el país». y que «sólo entre los años 2024 y 2026, se prevé invertir hasta 80 millones de euros en ayudas».

Todo ello para que Cataluña pueda multiplicar por 3,5 la producción actual en el año 2030 (hasta los 2 TWh/año) hasta representar el 5,7% del consumo actual de gas natural. Para alcanzar estas cifras, habrá que poner en marcha unas 80 nuevas instalaciones de codigestión anaerobia de potencia térmica media de biogás de 1,3 MW. Es decir, unas 12 plantas nuevas cada año, más la adaptación de algunos centros de tratamiento actuales. Ahora mismo hay 72 en funcionamiento, entre vertederos, tratamientos de barros de depuradora, residuos orgánicos municipales e industriales, codigestión y deyecciones ganaderas. Estas plantas valorizan los materiales orgánicos para obtener biogás y aprovecharlo para generar calor, electricidad o biometano, y también para obtener biofertilizantes.

La medida forma parte de la transición de Cataluña hacia un nuevo modelo energético más limpio, sostenible, democrático y justo, que pretende alcanzar la neutralidad climática en el año 2050. Se calcula que la reducción de gases de efecto invernadero (GEI) que comportará el incremento de generación y uso del biogás en los próximos años permitirá reducir la emisión de 350.000 toneladas de CO₂ eq/año a la atmósfera.

Para el consejero, el hecho de que Cataluña sea una de las regiones europeas con más disponibilidad de recursos es una gran oportunidad para el territorio, tanto económica como energética y ambiental. Por ello, la Generalitat está acabando de ultimar esta estrategia de biogás y preparando tres convocatorias de ayudas, por un importe total de 80 millones de euros.

Las ayudas se destinarán a la implantación de plantas de biogás, a la depuración del biogás a biometano y a las conexiones hasta red de distribución. La línea que se orientará a promover nuevas instalaciones de biogás fomenta el tratamiento de deyecciones ganaderas por digestión anaerobia de, como mínimo, el 50% de la materia orgánica tratada, hasta un tope de subvención de 3,5 millones de euros, y también incluirá la promoción de instalaciones de tratamiento de digestatos para valorizarlos como fertilizantes orgánicos, y se complementará la subvención hasta 1 millón de euros más. La otra línea facilitará la transformación del biogás de las plantas existentes a biometano, y la conexión de las que generen biometano a la red de distribución de gas para que lo puedan evacuar y comercializar, y así tomar terreno al gas de origen fósil.